martes, 6 de enero de 2009

No, yo nunca tuve un amor de verano. La verdad era que la sociedad y los medios me presionaron durante la secundaria, me atormentaron durante de la prepa pero no, jamás fuí a la playa con amigas y jamás tuve un amor de verano. Incluso en la universidad que fué cuando comienza mi vida amorosa lo mas cercano a un amor de verano fué Juanito que a decir verdad comenzó en verano y terminó en invierno, no hubo lágrimas, ni promesas de volvernos a ver, ni un atardecer hermoso en la playa y un último beso, simplemente desapareció.
Como toda mi vida contreras he sido, y mas que yo, mi vida como personaje es contreras pues esta encontró un amor de invierno. ¿Porqué no? debemos de hacer del invierno, primavera . Nosé ni como lo encontré. Mas bien si sé en donde, pero no supe a que hora o porque.
Volví a tener 17 años, pero esta vez con un amor de invierno. Tenía tanto tiempo que no intentaba cosas del amor y me sentía bien confundida, no sabía que hacer o decir, me quedaba muda, y sólo veía con ojos de amor al susodicho. Fué de lo mas raro, fué tan prohibido(para los 17 años mentales que tenía en esos momentos).
El punto es: no es para mi. Por mas que lo justifique, por mas que me guste, no es en verdad para mi; y eso duele.
Por fin había encontrado a alguien que al estrechar su mano me sentía protegida, al besar sus labios totalmente perdida, que al escucharlo me quedara callada, absorta, profunda, iluminada. Era "como antes". De ahí empezó mi confusión. Era como en los viejos tiempos de "Edmond y Milonas". Inventar besos, agarrar la frente, sacar la lengua, sentarse con las piernas cruzadas, hacerme creer que todo va bien y si no, al menos se va a componer.
Un domingo, un martes, un viernes, sábado y domingo. Locura, sensatez, sentimientos, lo inexplicable. Una forma de ser que no se mezcla con nada. Una idea semejante a la locura para los cuerdos y para los libres, hacer de tu vida un papalote pero a tu medida y gusto.
ya no esta, ya se fué, no hubo playa, no hubo atardecer, hacía frío, las calles vacías, domingo por la noche, me decía que me amaba, yo pensaba con todas mis ganas en no amarlo y se lo dije todas las veces que me lo preguntó; así sería mas fácil dejarlo y olvidar esto.
olvidarte quiero, esperarte espero.

2 comentarios:

Mónica dijo...

Que maravilla de texto...

Un beso

Señor Garza dijo...

tuve amores de verano, muchos, pero el invierno se encargo de terminarlos, o yo culpando al invierno...

me gusto tu post, me recordo tiempos pasados..

gracias