Hace mucho que no pensaba. Si lo pudiera explicar de alguna manera sería así: siento como si hubiera estado comiendo por mucho tiempo sin poder cagar. Ahora estoy cagando.

Pienso, luego existo; eso dicen por ahí. Creo que yo existí sin pensar y ahora que lo pienso, es igual de intenso pero en libertad. A prisa quizá pues no he tenido el tiempo para que sea lento, es mas ni siquiera lo había planeado. Llegó así de un recuerdo, nomas de repente y comenzó a doler mucho, tanto que no pude controlar lo que había ahí adentro y sólo escuché un lamento y lo dejé escapar al principio con miedo y al final con miedo también. Eramos dos personas en un mismo cuerpo: Alejandra y Alejandra. Por un instante pude escuchar, a lo lejos, como se quebraron en mil pedazos de memorias pasadas, ¿y es que acaso no era lo que tanto esperaba?. Pa´ pronto salieron a relucir las paranoias del pasado, diciendome que recogiera los pedazos lo mas rápido posible, los pegara y que fingiera que nada había pasado, que todo era como antes.

Y los pegué. El lamento cesó. Y todo siguió igual. Justo lo que no quiero.